“El mayor desafío que enfrentamos los ciudadanos es la falta de organización, porque, en los trayectos donde podemos organizarlos en diez o quince minutos, gracias a la falta de organización duramos horas y horas atorados en el tráfico, y esto solo genera mayor contaminación, es una falta de organización urbana.
Por lo tanto, mi mayor desafío es la contaminación que generamos consciente o inconscientemente todos los ciudadanos. La lección más importante que me enseñó la naturaleza, fue en el momento de la pandemia cuando el ser humano tuvo que guardar en la cuarentena, lo que vimos en la naturaleza es que ella se renovaba constantemente, que solo necesita un poco de espacio para sanar.
Los espacios con los que me siento más conectada con la naturaleza son la playa y el bosque, sobre todo las playas vírgenes donde no hay mucho turismos o mucha infraestructura y los bosques me gusta esta conexión, con la vida y sus ecosistemas.
Por otra parte no me gusta nada de mi comunidad, ya que cuando quiero organizar actividades culturales, deportivas o sociales tengo que acudir a otros lugares, desafortunadamente está contaminada y olvidada en este aspecto y las pocas actividades que se realizan no son de mi interés y creo que sí es un desafío para esta comunidad de Tesistán y sus alrededores realizar este tipo de actividades recreativas.
Creo que para mejorar como sociedad y sobre todo nuestro medio ambiente, para empezar los adultos debemos de dejar de estar en nuestro modo <pasivo> a estar un poco más consciente del medio ambiente y comenzar a educar a las nuevas generaciones, enseñarles de manera consciente lo que pueden hacer por su medio ambiente y comenzar a cambiar los malos hábitos, es difícil pero no imposible.”